Segunda parte: Asesórate, prepárate y haz números.
En la primera publicación de nuestros consejos para planificar tu reforma: Piensa en tu casa como un lugar eficiente, hablamos de la definición de tu reforma: de lo que deseas hacer y cómo desarrollar la idea que tienes. En esta segunda parte, te indicamos cómo preparar la parte económica y legal, es decir una vez que ya sabes qué es lo que quieres y antes de ponerte manos a la obra con los cambios, para ello:
Asesórate, prepárate y haz números.
- Recurre a un profesional:
Todos pensamos que seguir los consejos de la tía que acaba de reformar o los vídeos de la tienda de decoración nos valen para embarcarnos en nuestro proyecto de reforma. Si te vas a embarcar en un cambio que te duela en el bolsillo, es mejor pedir consejo a quien realmente sabe. Nadie mejor que un profesional en el ámbito te puede decir si lo que quieres hacer tiene viabilidad, cuanto puede costar y los posibles imprevistos que pueden surgir por llevar a cabo todos los cambios que deseas. Además, pueden sugerirte magníficas ideas e introducirte a las últimas tendencias y soluciones del mercado.
- Pide varios presupuestos:
Ya sabemos que tu primo se dedica a las reformas, pero hay muchas empresas más, y entre más presupuestos pidas, mejores ideas puedes añadir a tu proyecto. Pide al menos 3 presupuesto y compara. Si vas a pedir un préstamo, has lo mismo, evalúa varias opciones y escoge la que más te convenga.
- Aprovecha las subvenciones:
No puedes comenzar tu reforma sin haber investigado si alguno de los gastos es subvencionable y cómo puedes desgravártelo en la próxima declaración. Investiga y, en este tema, si es posible, asesórate también con un profesional. Existen toda clase de subvenciones a nivel local, regional y estatal.
- Solicita las licencias necesarias:
No pongas la grúa frente a tu casa por la cara, porque puede salirte más cara la multa que el permiso de aparcarla. Si vas a hacer cualquier reforma, investiga en el ayuntamiento si tu reforma es susceptible de solicitar licencia y añade los costes a tu presupuesto de gastos para tomar las decisiones pertinentes. Nuevamente, un profesional puede apoyarte en este proceso.
- Avisa a tus vecinos:
Antes de romper la primera baldosa, avisa a tus vecinos, no vaya a ser que te manden a la policía por hacer ruido y te paren los trabajos, lo cual, se traduce en un pastón. Habla con el administrador de tu comunidad, o con el ayuntamiento si tienes un chalet, para que te asesoren la mejor forma de no molestar a los residentes más cercanos.
Esperamos que siguiendo estas recomendaciones que te hemos dado en Montesinos Falcón Real Estate para planificar tu reforma, tengas claro todo lo que quieres, lo que necesitas, lo que realmente puedes hacer, y cuánto te va a costar hacerlo real. Y ahora ¡a proceder! ¡Mucha suerte!